Entrevistamos en las oficinas de CONINAGRO a Egidio Mailland , nuevo presidente de la entidad por el período 2014/2016. Casado, 2 hijas, es un productor agropecuario de Necochea que proviene de una familia rural que siempre operó en la cooperativa local y llego a presidir la Asociación de Cooperativas Argentina durante 2 periodos. Aquí sus palabras, ideas y proyectos.
Por: Juan Carlos Grasa
Me gustaría que nos cuente de sus principios, de cómo comienza a estar ligado a las cooperativas
Yo arranco por el año 83 donde soy convocado a participar del Consejo de la administración de una cooperativa como consejero suplente, mientras estaba haciendo una participación en la cooperativa telefónica rural de la ciudad de Necochea. Yo soy un productor agropecuario mixto, típico del sudeste, trigo-soja, en aquellos años girasol, también hago ganadería.
Dirigencialmente ¿Recuerda cuáles fueron sus comienzos?
Si, lo recuerdo perfectamente. En mi cooperativa, La Agropecuaria General Necochea Ltda., una muy prestigiosa cooperativa a nivel nacional y una de las top de ACA. Ahí comienza mi formación dirigencial, en una entidad de mucho prestigio, cosa que ayudó a mi formación. Esto hizo que en pocos años estuviera en la presidencia de la cooperativa ocupando por 7 años el cargo y la representación zonal en el distrito nº 7 de la Asociación Cooperativas Argentinas, donde me designan para participar políticamente – en aquel momento en ACA Salud- Ahí estuve un periodo, y después me trasladaron a la Asociación de Cooperativas en el 2005 donde estuve 2 años como consejero, otros 2 integrando la mesa ejecutiva como secretario y los últimos 2 como presidente.
Vemos que tu formación fue bien de abajo, comenzando desde una Cooperativa de base hasta llegar nada menos que a la Asociación. ¿Recordas los temas que se debatían en las Cooperativas en aquel momento?
En la década del 90 me tocó estar en la presidencia de la Cooperativa. Fueron años durísimos porque se cayó estrepitosamente la rentabilidad. Los precios de los commodities en esos años se desplomaron en el mundo, para recordar, el trigo llegó a valer 80 dólares, 120 la soja, y la argentina tenía un sistema económico igual al actual: un dólar encerrado en un cepo, donde un commoditie con precio internacional, cuando lo pasabas a pesos no alcanzaba para nada.
¿Cómo fue el panorama para los productores y Cooperativas en esos años, teniendo en cuenta el marco del sistema económico de los 90?
Vi caer una gran cantidad de productores y de Cooperativas. De las que estaban asociadas a ACA, cayeron más de 30, por suerte muchas se fusionaron y pudieron seguir adelante. El sistema de integración, en ese sentido, funcionó muy bien, cosa que no sucedió en el sector privado. En aquella época la Asociación hacia 8 o 9 millones de toneladas, y hoy superamos las 14. La triste historia que recuerdo, creo que por ser la primera, yo era un presidente muy joven, y me ha pasado de llegar diciembre y sentarme con quien era el gerente y preguntarnos: ¿adónde vamos? Hoy veo un escenario muy parecido.
Hoy si bien el escenario es muy parecido ¿qué realidad te devuelven los productores de cara al nuevo año? Existen muchos temas trabados, como las economías regionales o el trigo, para citarte 2 simples ejemplos
La capacidad de resistencia de un productor depende de varias cuestiones, desde la zona, el tipo de economía regional, el producto y el mercado. La sensibilidad de la caída va a ser directamente proporcional con el estado en que se encuentre.
El tema trigo se va a devorar media provincia de Buenos Aires, porque el trigo es una economía regional, no es un producto alternativo. Desde Tres Arroyos hasta Bahía Blanca funciona como economía regional, no sé qué se está haciendo con este cultivo. Cada región tiene su propia producción, como en Mendoza está el vino o en Misiones la yerba mate.
El dólar aplastado no tendría mayores consecuencias si la inflación esta planchada al igual que el gasto público, pero nuestra realidad es otra, y esto produce stock enormes de uva, de trigo, de yerba, de todo! Hoy a un yerbatero le aumentó toda la cadena de producción, pero le clavaron el precio en la góndola. Si este modelo continúa en el 2015, para un grupo muy grande de gente se va a asemejar mucho a los 90.
Hablando del sistema cooperativo, ¿cómo lo ves en este país en comparación a otros países? Porque si bien es un sistema que funciona, la realidad nos muestra que en países desarrollados funciona en un porcentaje mucho mayor al nuestro
El sistema cooperativo de comercialización y de trabajo, es líder en cualquier país desarrollado del mundo. Las cooperativas alemanas, brasileras, estadounidenses, francesas, son sistemas muy difíciles de superar. Son modelos muy poderosos que concentra su capacidad de compra, de venta, de comercializar, en base a una fuerza de conjunto y eso lo convierte en un competidor muy fuerte en varios aspectos.
Al recorrer el país he tenido contacto con varias Cooperativas y la verdad tienen una fenomenal inserción dentro de las comunidades, en cada pueblo seguramente hay una cooperativa agropecuaria, y en general es la que está involucrada en ayudar al hospital, a los bomberos, a los colegios. En nuestro país es un modelo exitoso en lo referido a lo social y a la comunidad.
¿Por qué crees que no hay más cantidad de productores dentro del sistema?
Va creciendo muy de a poco, y esto sucede porque ha demostrado transparencia tanto en la comercialización como en la organización. En épocas de crisis muchos productores se acercan a las Cooperativas porque encuentran la solidaridad que necesitan, y cuanto más se le aliviana la situación se alejan. No debemos pasar por alto que el ruralista argentino es muy individualista y es muy noble que se acerquen voluntariamente buscando apoyo de sus pares.
El cambio de explotación de las tierras ha traído aparejado, seguramente, otra percepción de la labor del campo
En los 90, muchos productores pequeños, en un gran porcentaje asociados a una cooperativa han desaparecido, y el traspaso de esas tierras fueron para profesionales, industriales quebrados, financistas que escapaban de la patria financiera que se refugiaban en el campo, por ende, todos esos campos terminaron en gente que no son chacareros. El concepto de la explotación de esos campos pasó de ser un medio de vida, a transformarse en un negocio.
El 70% de los campos del sudeste de la provincia de Buenos Aires están alquilados, y esto nos da un panorama de por qué no crece el cooperativismo, y es porque no hay más chacareros en los campos. Hay, por un lado, empresarios que están en el negocio de los granos, y por otro, chacareros que alquilan las tierras para aumentar su escala.
Ahora tu realidad es una nueva función que empezas a desempeñar dentro de Coninagro. ¿Cuáles serán tus primeros pasos en la agenda?
Ante todo vamos a juntarnos con el 50% de los integrantes de la Mesa de Enlace que aún no nos conocemos. Luego plantearemos con las entidades qué hacer para el 2015. Tuvimos una pre asamblea, nosotros consultamos todo el tiempo a las bases, quienes históricamente han participado de las decisiones. Sabemos que no queremos confrontación.
Como productor triguero, la relación Rural – Argentrigo ¿Qué opinión te merece?
El sistema de comercialización de granos y de intervenir mercados, con desazón, enojo de los productores, nos hizo perder una visión más global y clara de donde está el problema, y por más que uno quiera encontrar diferentes excusas, la realidad es una, y todos nosotros somos actores circunstanciales. Coninagro tiene una visión bien marcada, que puede compartir o no con La Rural, pero nuestra visión la vamos a defender.
Coninagro es la única entidad que tiene toda la cadena integrada en la misma línea: el productor privado, las plantas de acopio, las industrias y la exportación. Por lo tanto, al tener un conocimiento real de toda la cadena, trabajamos en la distribución de todo lo que se genera y tratamos de aportar valor agregado a lo que producimos. Por eso nuestra visión es amplia y completa, pudiendo ver dónde están los problemas. Eso es un gran beneficio.
Cual crees será la función de la Mesa de Enlace en este año que parece duro, ya con actores que no estuvieron en el conflicto
A mí me genera mucha expectativa porque esta es una entidad que ha decidido participar dentro de la Mesa de Enlace, porque toda la ruralidad así lo quiere. Es muy emblemático para un productor sentirse representado dentro de la Mesa de Enlace. Mi realidad hoy, es que no entré en actividad con ellos. En poco tiempo te podría contestar más ampliamente.
La gestión en Coninagro, será una proyección de la que se venía haciendo con Garetto
Coninagro seguirá con el mismo perfil de siempre, hay algunos cargos que han cambiado pero las personas somos las mismas, con una madurez de todos los que integran Coninagro, que me da mucha tranquilidad.