Por Bettina Cucagna – Perlitas Rurales
“Aquellos que dedican sus esfuerzos al mejoramiento metódico-científico de nuestras plantas agrícolas deben poseer gran vocación, perseverancia y fe en el éxito final. El valor de nuestras modernas variedades mejoradas hace que nos sintamos agradecidos y hasta con deuda con gente de otros tiempos, no obstante, podemos estar seguros de que las pequeñas mejoras que hoy se logran en cada nueva variedad son en general de gran importancia al ser traducidas a ingresos. Por todo lo expresado y con toda justicia, los fitotecnistas de nuestro país pueden sentirse orgullosos de sus realizaciones aunque sus nuevas variedades no signifiquen nuevos puntos de partida” expresó el Ing. Enrique Klein allá por 1969. Un pionero, un hombre con visión de futuro e incansable trabajador.
La historia del Criadero Klein cuenta con 100 años en Argentina y es parte importante del desarrollo de nuestro país como productor agrícola. Ubicándonos a principios del siglo pasado, a pocos años de la difusión de las leyes básica de la genética y cuando recién comenzaban a aplicarse de manera práctica estos conocimientos a nivel de producción, teníamos en el país los primeros resultados concretos. Debemos recordar que en los primeros años, la tarea fue difundir variedades puras en reemplazo de las poblaciones introducidas como semillas por los inmigrantes. Eso produjo un aumento de área y rendimientos superiores rápidamente. Luego vino la necesaria mejora en la calidad industrial para satisfacer a la molinería que comparaba la producción de Klein con la de otros países, tarea que fue cumplida ingresando genética de otros orígenes, la cual mediante cruzamientos adecuados logró adaptación y fueron las nuevas variedades.
El Dr. Enrique Klein a través de ciclos de recombinación genética fue mejorando en una tarea que sigue hasta nuestros días.“La resistencia genética a las enfermedades siempre debe ser un componente esencial de una variedad exitosa” afirman desde el laboratorio de la Empresa centenaria. ¿Cómo se logra trascender y permanecer con una Empresa dedicada al agro en un país con tantos vaivenes? Quizá la respuesta no sea para todos igual pero no hay duda que la ética, la transparencia y la honestidad han sido pilares fundamentales en el Criadero Klein de histórica trayectoria.
A mediados de 1919, el Dr. Enrique Klein fundó en Alfonso, provincia de Buenos Aires, el primer Criadero de Plantas Agrícolas y después de haber ensayado en otras localidades de la zona triguera, decidió radicarse junto a su esposa Amalia María Reisch Schölderle en Alfonso, y luego en el partido de Alberti. Según comentó el fundador, en Alfonso había exceso de fertilidad para el desarrollo del cultivo de trigo y Alberti reunía mejores condiciones agroecológicas para el funcionamiento del Criadero. Y no se equivocó este visionario nacido el 9 de agosto de 1889 en la ciudad de Colonia, Alemania Occidental, quien fuera ayudante técnico y colaborador del Dr. Alberto Boerger en la organización de los trabajos de fitotecnia en la República Oriental del Uruguay y Jefe de la repartición Fitotecnica en el Instituto del Semillero Nacional del Uruguay donde hizo los primeros 5 cruzamientos artificiales, además de varias selecciones individuales elegidas con el Dr. Boerger en Toledo, Uruguay.
Un largo y fructífero camino del Criadero
En 1920 Don Enrique Klein termina su contrato en Uruguay y muda su actividad a la Argentina. En ese mismo año se difunde por primera vez en nuestro país una variedad mejorada lograda en colaboración con el Dr. Alberto Boerger en La Estanzuela, bajo el nombre de “Favorito” cuya rápida difusión superó 1.000.000 de hectáreas sembradas. Distintas etapas o períodos fueron tomando fuerza y logrando un importante crecimiento, destacando siempre la calidad de las semillas de trigo. En 2001 se incorpora al programa de mejoramiento el Ing. Agr. Néstor Machado, mejorador de gran experiencia quien no pertenece a la familia y acompaña los intercambios de materiales entre empresas de América y Europa, dejando de ser el Criadero puramente familiar.
“La tarea iniciada por el Dr. Enrique Klein en 1919 fue continuada por uno de sus hijos, el Ing. Oscar Klein quien fuera Director Técnico junto a sus otros 9 hijos quienes se desempeñaron en diversas áreas, asegurando el crecimiento de la Empresa. Otros cambios en el manejo de los cultivos fueron acompañados por las variedades del Criadero Klein, como el caso del uso de fertilizantes químicos, de fungicidas y la adopción masiva de la siembra directa. En la última década, el Criadero ha incorporado las innovaciones tecnológicas a través de convenios y el contacto directo con sus autores. Transcurrieron 100 años desde el inicio y hoy festejamos con orgullo esa trayectoria junto a los productores y profesionales quienes siempre nos acompañaron, creyendo en los valores impulsados por el fundador y reafirmados por sus sucesores”, comentó el Ing. Agr. Néstor G. Machado, Senior Breeder del Criadro Klein S.A.
Hoy festejan 100 años de trayectoria desde el inicio de la tarea liderada por el Dr. Enrique Klein, la que nunca se detuvo ni cambió su visión optimista del país como destacado productor de trigo, la cual comenzó compitiendo bajo las condiciones de 1919 y continúa con mucha fuerza en 2019 .