Por: EEAI Barrow Ing. Agr. Dr. Marcos Yanniccari e Ing. Agr. MSc. Ramón Gigón
El ryegrass resistente a herbicidas constituye un gran problema en diversos países del mundo (Heap, 2015). En Argentina, este problema detectado inicialmente en el sur de la Pcia de Buenos Aires, ha alcanzado considerable importancia a escala regional hacia el centro y norte de Buenos Aires, Santa Fe y Entre Ríos.
Ciertas características propias de la especie como el elevado nivel de alogamia, su alta producción de semillas y la gran plasticidad, han permitido que las poblaciones de ryegrass se adapten a los sistemas agrícolas, evolucionando hacia la resistencia a herbicidas. Las prácticas de manejo pueden afectar la tasa de evolución de la resistencia, es decir, incrementar o retrasar el proceso. En este sentido, es necesario tener en cuenta especiales recomendaciones de manejo para evitar la dispersión de la resistencia dentro del lote problema, entre lotes próximos tanto como a nivel regional.
Se debe tener en cuenta que en el caso de ryegrass, la resistencia a herbicidas puede dispersarse potencialmente mediada por el polen o semillas. Entonces, todas las medidas que tiendan a limitar la floración, fructificación, dispersión y viabilidad de las semillas contribuirían a prevenir el avance de la resistencia.
TRATAMIENTO DEL RYEGRASS RESISTENTE EN ESPIGAZÓN: En situaciones de lotes en barbecho, destinados a cultivos de verano (donde se encuentren plantas que han escapado a los controles con herbicidas), los cortes en pre-antesis permiten reducir y retrasar el período de floración. De esta manera, se limitaría la producción de polen y también la producción de semillas. Aplicaciones de glifosato+cletodim en pre-antesis ó paraquat en post-antesis (grano lechoso) limitaría la producción de polen y semillas o la producción de semillas y su viabilidad, respectivamente (Steadman et al., 2006). –
MANEJO DURANTE LA COSECHA Y POST-COSECHA DE CEREALES DE INVIERNO: En términos generales, las poblaciones de ryegrass a manejar dentro de los próximos dos años, dependerán en gran medida de la producción de semillas que en el presente año lleguen al banco de propágulos del suelo.
Por tanto, es necesario tener los siguientes recaudos al momento de la cosecha y post-cosecha:
+ Si el manchón de la maleza está delimitado y en poca superficie se puede dejar sin cosechar y realizar un corte o aplicación de herbicida para evitar la producción de semillas.
+ La producción de esos lotes mantenerla identificada y en el lote problema comenzar a diseñar estrategias de control-manejo para el siguiente cultivo de la rotación.
+ Aquellos lotes de trigo o cebada en los que han presentado erráticos controles de ryegrass empleando algún herbicida, se deberían cosechar últimos para evitar que las semillas de la maleza sean incorporadas al banco de propágulos de los siguientes lotes a recolectar. Limpiar la cosechadora fuera del lote y quemar los restos de la limpieza
+ Luego de la cosecha de cada lote problema limpiar la cosechadora. Así se continúe en un lote libre de resistencia o no se debe evitar la mezcla de biotipos resistentes. Para la limpieza de la maquina se aconseja seguir el protocolo detallado por Lanfranconi et al. (2013): http://inta.gob.ar/sites/default/files/script-tmp-inta_gua_para_la_limpieza_de_cosechadoras.pdf