El último informe del USDA confirma una soja global abundante, con stocks en alza y presión bajista sobre los precios. Sin embargo, la firmeza de la demanda china y el empuje del aceite para biodiésel sostienen oportunidades en subproductos.
Por Sebastián Salvaro – Co Founder y Director de Simpleza SA
Para el productor argentino, la clave estará en estrategias de venta escalonadas.
El informe del USDA de septiembre 2025 volvió a poner a la soja en el centro de la escena, con un mensaje claro: la oferta global sigue siendo amplia, pero la demanda también muestra firmeza, especialmente en harina y aceite de soja. Para el productor argentino, el mercado presenta oportunidades, aunque con riesgos crecientes que exigen una estrategia comercial activa y flexible.
Fundamentos del USDA: oferta, demanda y stocks
- Producción global
- EE.UU.: recorte a 117 Mt, por rindes más bajos (186,7 bu/acre), a pesar de mayor área cosechada.
- Brasil: se mantiene en niveles récord, con 169 Mt, ratificando su rol como primer exportador mundial.
- Argentina: sin cambios, con 51 Mt, pero condicionada por clima y factores locales (financiamiento, retenciones).
- Comercio internacional
- Exportaciones de EE.UU. bajan a 46 Mt, presionadas por la competencia sudamericana.
- China sostiene importaciones en 102 Mt, lo que reafirma su rol central en la formación de precios.
- Brasil concentra buena parte de los embarques hacia el gigante asiático.
- Stocks y relación stock/consumo
- Los stocks finales globales suben a 145 Mt (+12 Mt vs campaña previa).
- La relación stock/consumo asciende al 25%, un nivel que sugiere un mercado menos tensionado y con riesgo de presión bajista sobre las cotizaciones internacionales.
Comercio mundial: China marca el pulso
La estrategia de compras de China está reconfigurando el mapa sojero:
- Recientemente, Beijing aumentó la adquisición de soja en Argentina y Uruguay, como parte de su política de diversificación frente a tensiones comerciales con EE.UU.
- En paralelo, se concretó un contrato por 30.000 t de harina de soja argentina hacia feedlots chinos, el primero de esta magnitud desde 2019. Esta noticia es clave: muestra que no solo el grano, sino también el valor agregado local en harina tiene mercado.
- La firmeza de la demanda china de proteína vegetal garantiza un piso de consumo, aunque los precios seguirán reaccionando a cualquier movimiento de política comercial o sanitaria en el país asiático.
El factor aceites y biodiésel
El aceite de soja se consolidó como un driver adicional del mercado:
- EE.UU. continúa expandiendo su programa de biocombustibles renovables, lo que sostiene la demanda interna de aceite y eleva las primas en ese mercado.
- Asia también refuerza sus programas de biodiésel, lo que mantiene activa la competencia por aceites vegetales, incluso con alternativas como palma o canola.
- Para Argentina, donde la industria aceitera ya tiene capacidad instalada y experiencia exportadora, este contexto representa una oportunidad.
Implicancias para el productor argentino
- Precios y comercialización
- El exceso de stocks globales limita las chances de subas fuertes.
- Sin embargo, el clima sudamericano y la firme demanda de subproductos pueden abrir ventanas de oportunidad.
- Estrategias de venta
- Conviene avanzar en una comercialización escalonada, asegurando pisos a través de futuros y opciones.
- Factores locales
- La política de retenciones y el tipo de cambio siguen siendo condicionantes.
- Ahora a la espera de octubre en las elecciones de medio tiempo a nivel nacional, que aportara tranquilidad o alta volatilidad a la macroeconomía y al mercado de Soja.
En síntesis
El mercado de soja se mueve hoy entre dos fuerzas: stocks globales altos que presionan a la baja y una demanda de subproductos y biodiésel que aporta sostén.
La clave en este horizonte es la estrategia activa: ventas escalonadas, coberturas inteligentes y atención a las señales de China y al clima regional. En un mercado global abundante, la diferencia la hará quien logre anticiparse y agregar valor a su producción.