Manejo de enfermedades de fin de ciclo en Soja
El uso de fungicidas en el cultivo de soja, especialmente atendiendo al complejo conocido como enfermedades de fin de ciclo (EFC), suele generarles muchos interrogantes a los responsables de producir.
Duda ante las EFC
Un punto de partida que genera esas preguntas podría ser el costo en el que se incurre en la aplicación de un fungicida foliar. Cualquier mezcla (triazol + estrubirulina) del mercado debe presupuestarse a partir de U$S12 por hectárea, aproximadamente, hasta más de U$S 20 en caso de triples mezclas (sumando las carboxamidas). Más los dólares de la aplicación propiamente dicha.
Inclusive, si por un momento nos olvidamos del aspecto económico, los interrogantes persisten, y desafían al quehacer de los profesionales de la agronomía; las enfermedades de fin de ciclo en soja, nos lleva a preguntarnos:
- ¿En qué momento aplico? ¿Siempre en el mismo estadío fenológico?
- ¿Qué fungicida utilizo?
- ¿Alguna mezcla en particular? ¿Qué principios activos?
- ¿Espero ver síntomas para aplicar?
- ¿El pronóstico de las condiciones ambientales me ayuda?
- ¿Cuánto me aporta la genética en esta problemática?
Estos son algunos de los interrogantes que surgen al momento de escribir esta nota; luego, en cada lote, en cada situación, y cada año las preguntas son más y de mayor complejidad. Este tema nos lleva a otra de las tantas brechas que tenemos entre lo efectivamente producido y lo que podríamos lograr.
Conocimientos disponibles
Por suerte, o mejor dicho, por trabajo, hay un grupo de fitopatólogos en el país que nos ayudan, a través de sus estudios, a responder varios de los interrogantes, y así poder tomar decisiones en el marco de las empresas de producción. De igual forma muchos profesionales asesores y productores, año tras año justifican técnicamente sus estrategias en el manejo de las enfermedades de fin de ciclo en soja.
A continuación se detallan una serie de puntos que el fitopatólogo, Ing. Agr. M Sc Marcelo Carmona, dejó en claro a través de sus trabajos en la materia. Considero que son ítems fundamentales para la guía en la toma de decisiones respeto a qué hacer con la EFC:
- La aplicación de fungicida en base a la cuantificación visual de síntomas tiene un valor limitado, debido a que la infección temprana resulta en el desarrollo de síntomas hacia el final del ciclo, cuando el daño por las EFC ya se ha producido.
- La cuantificación visual de las EFC no es buen indicador para estimar las reducciones en los rendimientos
- La intensidad de ataque de las EFC se puede predecir en base las precipitaciones ocurridas entre los estadios fenológicos R3 y R5 de la soja
- Las respuestas a las aplicaciones de fungicidas suelen variar campaña tras campaña. Las precipitaciones entre R3 y R5 ayudan a explicar la respuesta diferencial de los tratamientos. Cuando las lluvias acumuladas a partir de R3 son de aproximadamente 50-60 mm, la aplicación de fungicidas tendría un respuesta positiva
- En años lluviosos las mezclas de triazoles + estrobirulinas producen una mayor respuesta en comparación con moléculas solitarias de triazoles. Probablemente la actividad protectora de las estrobirulinas mejoran el control de las EFC, en años lluviosos, cuando estos patógenos son más activos. Brindan mayor período de protección.
- En años de bajas precipitaciones la aplicación de fungicidas puede resultar de un margen bruto negativo.
- En años muy lluviosos, debido a la necesidad de aumentar la protección e incrementar la prevención, es recomendable aumentar la dosis comercial de las mezclas.
- La respuesta en el rendimiento es mayor en las aplicaciones en R3 en comparación con las de R5 cuanto más lluvioso sea el año.
- Con períodos lluviosos entre R3 y R5, monocultivo y presencia de inóculo o síntomas, la repuesta ante la aplicación de fungicida, está garantizada.
Los puntos recién descriptos suelen ser una interesante guía para poder darle forma a las estrategias de manejo de enfermedades de fin de ciclo en los lotes de soja. Son muchas las experiencias que de alguna forma corroboran éstos criterios y ayudan a tomar decisiones.
Experiencias de Okandú
Como siempre, desde Okandú pretendemos llevar adelante experiencias que ayuden o colaboren a la toma de decisión de los productores y técnicos.
A continuación se muestran algunos resultados de ensayos llevados a cabo en las últimas campañas. A través de los mismos se pretende fortalecer algunos de los criterios descriptos anteriormente.
Las experiencias son llevadas a cabo en el campo experimental de Okandú, ubicado en las cercanías de la localidad de inriville, en el Sudeste de la Provincia de Córdoba.
Campaña 2017-2018
Vayamos de atrás para adelante. Veamos lo ocurrido en la última campaña, “la 17-18”, caracterizada por un sequía con pocos precedentes similares en toda la historia, desde que se tiene registros.
Tabla 1. Información de manejo del sitio experimental.
Fecha de Siembra | 25 Oct. 2017 |
Antecesor | Soja |
Variedad | NS 4619 |
Distanciamiento entre hileras | 52.5 cm |
Densidad de siembra
Sembradora experimental |
350.000 semillas/ha
Eraso ME 4-08 |
El diseño experimental fue en bloques completamente aleatorizados, con 3 repeticiones. Las unidades experimentales (parcelas) fueron de 2,1 m de ancho y 5.5 m de largo.
Tabla 2. Tratamientos, fuentes, dosis y momentos de aplicación.
Producto | Momento | Dosis | Coadyuvante |
Testigo absoluto | R3 | – | – |
R5 | – | – | |
R3 + R5 | – | – | |
Tebuconazole | R3 | 250 cc/ha | Cubo 200 cc/ha |
R5 | 250 cc/ha | Cubo 200 cc/ha | |
R3 + R5 | 250 cc/ha+ 250 cc/ha | Cubo 200 cc/ha | |
Amistar xtra | R3 | 300 cc/ha | Cubo 200 cc/ha |
R5 | 300 cc/ha | Cubo 200 cc/ha | |
R3 + R5 | 300 cc/ha + 300 cc/ha | Cubo 200 cc/ha | |
Orquesta ultra | R3 | 800 cc/ha | Cubo 200 cc/ha |
R5 | 800 cc/ha | Cubo 200 cc/ha | |
R3 + R5 | 800 cc/ha + 800 cc/ha | Cubo 200 cc/ha | |
Orquesta ultra | R3 | 800 cc/ha | Aceite 400 cc/ha |
R5 | 800 cc/ha | Aceite 400 cc/ha | |
R3 + R5 | 800 cc/ha + 800 cc/ha | Aceite 400 cc/ha | |
Stinger | R3 | 300 cc/ha | Cubo 200 cc/ha |
R5 | 300 cc/ha | Cubo 200 cc/ha | |
R3 + R5 | 300 cc/ha + 300 cc/ha | Cubo 200 cc/ha |
Durante la campaña 2017/18, las precipitaciones durante la primavera (Septiembre y Octubre) estuvieron cerca de la media de la región (Figura 1). En Noviembre estuvo por debajo de la media y en Diciembre por encima del promedio. Sin embargo, a partir de Enero, Febrero y Marzo, se presentó una situación de sequía, acumulando durante el período recién mencionado tan solo 40 milímetros. Esta eventualidad, afecto al cultivo durante su período crítico, no permitiendo que el mismo pueda expresar su potencial.
Figura 1: Precipitación acumulada mensual para el período 2007-2017 y para la campaña 2017/18 en Inriville.
Resultados:
- La primera conclusión obtenida a partir de los resultados de este ensayo es que la oferta ambiental durante el ciclo del cultivo permitió alcanzar un rendimiento promedio de 3.440 kg/ha, y esto es muy bajo respecto al potencial del ambiente en años de “precipitaciones normales”.
- Se ve una diferencia muy acotada entre los diferentes tratamientos, y el testigo sin aplicación. Esto se debería, a que durante los meses de Enero y Febrero se presentó una condición climática de déficit y hídrico y sequía que no permitieron el desarrollo de enfermedades de fin de ciclo en el cultivo de soja.
Comentario:
- Cualquiera sea el principio activo utilizado, no se obtuvieron respuestas importantes. Esto afirma la importancia de las precipitaciones durante los estadíos R3 y R5, y su relación con el desarrollo de enfermedades de fin de ciclo.
Campaña 16-17
Durante esa campaña el patrón de precipitaciones fue diferente, y los resultados obtenidos en el uso de fungicidas para el tratamiento de EFC también lo fue.
A continuación se detalla la experiencia realizada en el verano de la 16-17.
Tabla 1. Información implantación del cultivo.
Fecha de Siembra | 11 Nov. 2016 |
Antecesor | Soja |
Variedad | DM 4612 |
Distanciamiento entre hileras | 52.5 cm |
Densidad de siembra
Sembradora experimental |
350.000 semillas/ha
Eraso ME 4-08 |
El diseño experimental fue en bloques completamente aleatorizados, con 4 repeticiones. Las unidades experimentales (parcelas) fueron de 2,1 m de ancho y 5.5 m de largo.
Tabla 2. Tratamientos, fuentes, dosis y momentos de aplicación.
Producto | Momento | Dosis | Tratamiento |
Testigo absoluto | – | – | 1 |
Tebuconazole | R3 | 250 cc/ha | 2 |
R5 | 250 cc/ha | 3 | |
R3 + R5 | 250 cc/ha+ 250 cc/ha | 4 | |
Amistar xtra | R3 | 300 cc/ha | 5 |
R5 | 300 cc/ha | 6 | |
R3 + R5 | 300 cc/ha + 300 cc/ha | 7 | |
Miravis duo | R3 | 500 cc/ha | 8 |
R5 | 500 cc/ha | 9 | |
R3 + R5 | 500 cc/ha + 500cc/ha | 10 |
Durante la campaña 2016/17, las precipitaciones durante la primavera (Septiembre y Octubre) estuvieron por encima de la media de la región (Figura 1). Sin embargo, en Noviembre y Diciembre estuvo debajo del promedio (dándose un período donde no ocurrieron precipitaciones, desde mediados de noviembre a hasta el 21 de Diciembre). En Febrero, se registró un valor promedio menor al histórico. No obstante Marzo “fue muy llovedor”. Como puede observarse, la campaña se desarrolló con una oferta hídrica variable, con excesos y déficits durante el ciclo del cultivo.
Figura 1. Precipitación acumulada mensual para el período 2007-2015 y para la campaña 2016/17 en Inriville.
La oferta ambiental durante el ciclo del cultivo permitió alcanzar un rendimiento promedio de 4.752 kg/ha (Figura 2).
Resultados:
- Como puede observarse en el gráfico de rendimientos, hay diferencias significativas entre tratamientos (p<0.05).
- Los resultados muestran que la diferencia en el rendimiento se explica a través de 2 variables: momento de aplicación y producto utilizado. Los tratamientos con estrobirulinas y carboxamidas, en doble aplicación (R3 y R5) y en R5, se destacan sobre el resto.
- El tratamiento de mayor rendimiento fue el número 10, aplicado en R3 y en R5 con Miravis duo (500 cm3/ha), dando un promedio de 5286 kg/ha. Se obtuvo una respuesta de 700 kg/ha en comparación al testigo sin aplicar.
- Además, para los fungicidas Amistar xtra y Miravis duo aplicados en R5 y R3 + R5 se vieron respuestas que van de los 300 kg/ha a los 700 kg/ha con respecto al aplicado con tebuconazole en los mismos estadios.
- No se vieron respuestas significativas en los tratamientos aplicados con tebuconazole y el testigo.
- No se vieron diferencias significativas entre los tratamientos aplicados en R3 y el testigo.
- Pudo observarse que los tratamientos aplicados con Miravis duo, (contiene pydiflumetofen, del grupo químico de las carboxamidas), rindieron en promedio 200 kg/ha más que los aplicados con Amistar xtra (estrobirulina + triazol) en los mismos estadios.
Comentarios:
- Se vio claramente que las diferencias en el rendimiento se debieron a momento de aplicación y producto utilizado.
- El momento, puede explicarse por las condiciones ambientales (precipitaciones) y la predisposición a la aparición de enfermedades; coincidente con los estadio fenológicos más avanzados en el cultivo de soja (R5-R6). No se dio de igual forma hacia los estadios reproductivos más tempranos (R1 a R3); las precipitaciones en ese momento fueron más escasas respecto a la media.
- Los productos con residualidad (estrobirulina y carboxamida) mostraron una performance muy destacada respecto a los que no la tienen y al testigo, reflejándose en el rendimiento del cultivo. Además, se observó una mayor duración del área foliar en los tratamientos con Amistar xtra y Miravis duo.
- El uso de fungicidas con distintos modo de acción tuvo respuestas positivas y con diferencias significativas, a favor de aquellos que combinan principios activos con distinta residualidad. En este caso, pudo verse que Miravis duo (carboxamida + triazol) tuvo ventajas sobre Amistar xtra (estrobirulinas + triazol), para lo cual debería repetirse la experiencia en otros años y estudiar el comportamiento de la carboxamida frente a productos con estrobirulinas. Inclusive las triples mezcla (triazol + estrobirulinas + carboxamidas)
Conclusiones
El uso de distintos principios activos de fungicidas para mejorar el estado sanitario de cultivos de soja y su impacto en el rendimiento, debe seguir siendo estudiado, ya que se observa una alta frecuencia de lotes con distintas afecciones de enfermedades, dependiendo del año.
Debemos seguir ajustando el manejo de las enfermedades fúngicas en soja. Tenemos que seguir trabajando en achicar esta brecha. No nos alcanza con aplicar por prevención; debemos hacer foco en cuándo aplicar, con qué producto, con qué pronósticos, etc., etc.
Tenemos mucho por aprender en este tema, también.