CAMPAÑA 2023-INTA EEA Pergamino
Ings. Agrs. Gustavo N. Ferraris1 y Ana Paula Canu2
1.INTA EEA Pergamino. 2. Chacra Servicios SRL –
Introducción
Camelina sativa es una Brassicaceae invernal, de bajo porte, ramificadora, resistente a la sequía y las heladas. Esto es muy característico de la especie, ya que en estado de roseta es capaz de soportar temperaturas de hasta -12 oC (Gugel et al., 2006). El óptimo para su crecimiento se ubica entre 7 y 33 oC (Falasca et al., 2014). Las temperaturas excesivamente altas durante floración y llenado perjudican severamente los rendimientos (Enjalbert y Johnson, 2011). Aunque sus requerimientos y biomasa son limitados, los máximos rendimientos se obtienen con precipitaciones entre 350 y 500 mm. Su superficie está en continuo crecimiento en países como España o México, con el objetivo de producir biocombustibles para aeronáutica o alimentación para el ganado. Como la mayor parte de las crucíferas, es extremadamente sensible a algunos herbicidas residuales, como los inhibidores de la enzima ALS (Alajarín, 2016), y a las deficiencias nutricionales (Miralles et al., 2017; Basalma et al., 2018)
Aun en especies con alta eficiencia de uso y capacidad de respuesta, el exceso de fertilización nitrogenada tiene consecuencias económicas y ambientales desfavorables. Ya en 2015, un panel de expertos en manejo de N advirtió sobre los riesgos de degradación de los suelos cuando la fertilización es extremadamente escasa (figura 1), lo que viene ocurriendo en Argentina hasta el momento. Sin embargo, dosis excesivas en un comportamiento de respuestas decrecientes a su incremento generan bajas eficiencias de uso de N (EUN) y productividades parciales del factor (PPF) (Figura 1). La fuente utilizada es relevante, ya que determinan un aporte más o menos balanceada de nutrientes, así como riesgos de pérdidas por volatilización o lixiviación.
Figura 1: Rendimiento según dosis de nitrógeno para diferentes eficiencias de uso y productividades parciales del factor nitrógeno. Se describen patrones de respuesta que podrían significar riesgo de agotamiento de recursos, contaminación, o rangos ideales de eficiencia.
Los objetivos de este experimento fueron 1. Evaluar la respuesta de Camelina sativa a la fertilización con nitrógeno (N), azufre (S) y fósforo (P) en la región norte de Bs As y 2. Evaluar el efecto de diferentes fuentes sobre la respuesta agronómica.
Hipotetizamos que: 1. Camelina sativa incrementa los rendimientos cuando se fertiliza con elementos que se encuentran en concentración deficiente en los suelos 2. La respuesta y eficiencia agronómica varían con la fuente utilizada, y 3. Es posible ajustar una curva de respuesta que determine, preliminarmente, la dosis óptima de N.
MATERIALES Y MÉTODOS
Durante el año 2023, se condujo un experimento de fertilización a campo con la especie Camelina sativa en la EEA INTA Pergamino, sobre un suelo Serie Pergamino, Clase I-2, Argiudol típico, familia fina, illítica, térmica (USDA- Soil Taxonomy V. 2006). Se sembró el día 18 de Julio, a una densidad de 150 pl m-2 y con distanciamiento de 0,2 m entre líneas. El experimento se dividió en dos partes. Por un lado, se evaluó respuesta a N y S mediante cuatro dosis, dos fuentes y un testigo totalizando nueve tratamientos. Recibió una fertilización de base con superfosfato triple de calcio (0-20-0) a la dosis de 50 kg ha-1 en línea de siembra. La respuesta a fósforo se evaluó en un contraste de testigo vs fertilizado, con una base de 200 kg ha-1 de Sol Mix chorreado a la siembra.
Como preemergente se aplicó Glifosato 2000 ml/ha + Trifularina fotoestable a 3000 ml/ha. Durante el ciclo se realizaron dos aplicaciones de insecticidas, para controlar pulgón (Brevicorryne brassicae L.) y la oruga de las crucíferas (Plutella xylostella), ambos en bajas poblaciones.
Se utilizó un diseño estadístico en bloques completos al azar con 4 repeticiones. Los tratamientos evaluados se presentan en la Tabla 1. Por su parte, el análisis de suelo del sitio se presenta en la Tabla 2. Las aplicaciones de nitrógeno fueron realizadas pocos días después de la siembra, sin incorporación.
Tabla 1: Respuesta a nitrógeno y azufre. Campaña 2023.
Tabla 2: Datos de suelo al momento de la siembra
Se determinó biomasa aérea en floración plena (F2) de la escala CETIOM (Agosti et al., 2009). Se determinó NDVI por Green seeker, intercepción y se estimó el contenido de N foliar por Minolta Spad. La cosecha se realizó en forma manual, con trilla estacionaria de las muestras. Los resultados se analizaron mediante partición de varianza comparaciones de media y análisis de regresión.
RESULTADOS
- Condiciones ambientales de la campaña
A la siembra, el perfil se encontraba con un moderado nivel de almacenaje, con recarga adecuada en el primer metro de suelo y muy baja en el segundo metro. Las precipitaciones de septiembre, de 107,3 mm permitieron sostener las reservas y consolidar los rendimientos, además de prevenir la ocurrencia de bajas temperaturas (Figura 2). Un evento de helada del día 12 de octubre que afectó a los trigos de la región, no perjudicó a Camelina, aunque se encontraba en plena etapa reproductiva. Las condiciones de llenado fueron favorables, sin golpes de calor ni lluvias excesivas. El ambiente climático resultó favorable, en comparación con las dos campañas previas (Figura 3).
Figura 2: Precipitaciones entre junio y noviembre para la campaña 2023, en comparación con la media histórica y dos ciclos anteriores. Valores acumulados cada 10 días en mm. Nótese la persistencia de un ciclo seco, con lluvias por debajo de la media.
Figura 3: Temperaturas máximas y mínimas medias decádicas entre el 1 de Mayo y el 31 de Noviembre. Datos estación meteorológica INTA Pergamino.
Resultados de los experimentos
En la Tabla 3 se presentan datos de observaciones tomadas durante el ciclo de cultivo, mientras que en la Figuras 4, 5 y 6 los rendimientos como resultado del agregado de nitrógeno-azufre, fósforo y un ajuste de la curva de respuesta a N.
Tabla 3: Biomasa aérea (BA) en floración plena (F2), contenido de N foliar por Spad y NDVI por Green seeker, a) fertilización con nitrógeno – azufre. b) Fertilización con fósforo. Fertilización nitrogenada en Camelina sativa. Pergamino, año 2023.
Figura 4: Rendimiento de Camelina sativa según fuente y dosis de fertilizante agregado. A) Nitrógeno – azufre. b) fósforo. Letras distintas sobre las columnas representan diferencias significativas entre tratamientos (LSD a=0,05, INTA Pergamino, año 2023.
Figura 5: Relación entre rendimiento y dosis de nitrógeno agregada, para Urea, Solmix y el conjunto de ambas fuentes, ajustado según una función cuadrática. Fertilización con nitrógeno y azufre en Camelina sativa. Pergamino, año 2023.
DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES
Camelina se adaptó bien a un ambiente seco inicial, y presentó una reacción muy favorable a la mejora del ambiente desde septiembre. Las plantas expresaron un porte moderado, con una muy buena fructificación. No se registraron adversidades bióticas de relevancia que comprometieran los rendimientos.
Las variables intermedias reflejaron el efecto de tratamiento y presentaron buena correlación con rendimiento, especialmente materia seca, intercepción y NDVI (Tabla 3). El mayor contraste se comprobó entre testigo y tratados.
Los rendimientos presentaron diferencias significativas (p<0,05) para N (Figura 4.a) y P (Figura 4.b) La respuesta a P fue notable, en crecimiento (Tabla 3.b) y productividad (Figura 4.b). Respecto de N, las fuentes presentaron un comportamiento dispar. Urea evidenció un incremento sensible hasta la dosis de N60, pero disminuyó en adelante, sin explicación aparente. SolMix en cambio, mostró un aumento sostenido en todo el rango de dosis evaluado (Figura 4.a). Un ajuste conjunto de ambas fuentes ubica el rendimiento máximo en N80, pero con valores cercanos a los de N60, donde estaría el óptimo económico para cultivos de alto rendimiento. Cabe consignar que este comportamiento se comprueba en un sitio con moderado a alto nivel de N en suelo (tabla 2), como resultado de la magra cosecha de la campaña anterior.
Los resultados obtenidos permiten aceptar las hipótesis propuestas:
1. Camelina sativa responde a P y N alcanzando su máximo en dosis moderadas. A diferencia de otras Brasicaceas, la respuesta a S aparece más errática, y asociada a altos niveles de N.
2. El comportamiento medio de ambas fuentes fue similar, pero con diferente dinámica, prevaleciendo el líquido NS en las dosis más altas de N. Esto sugiere interacción NxS significativa, o una dosis mínima de S para comprobar efectos.
3. Se comprueba una relación funcional entre rendimiento y dosis de N agregada, para un sitio de buen rendimiento.
BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA
* Alajarín, M. 2016, Tolerancia de Camelina (Camelina sativa L Crantz) a diferentes aplicaciones herbicidas. Trabajo final de graduación. Universidad Politécnuca de Madrid.
* Melchiori, R. J., Coll, L., Albarenque, S., Pautasso, J. M., & Kemerer, A. C. (2018). Limitantes nutricionales y variabilidad espacio-temporal del rendimiento en colza. Repositorio INTA. www.inta.gob.ar
* Gugel, R. K., & Falk, K. C. (2006). Agronomic and seed quality evaluation of Camelina sativa in western Canada. Canadian journal of plant science, 86(4), 1047-1058.
* Falasca, S. L., Del Fresno, M. C., & Waldman, C. (2014). Developing an agro-climatic zoning model to determine potential growing areas for Camelina sativa in Argentina. QScience Connect, 2014(1), 4.
* Enjalbert, J. N., & Johnson, J. J. (2011). Guide for producing dryland camelina in eastern Colorado. Fact sheet (Colorado State University. Extension). Crop series; no. 0.709.
* Basalma, D., Gursoy, M., & Nofouzi, F. (2018). Factors affecting agricultural characteristics of Camelina sativa (L.) Crantz under dry-summer subtropical and warm temperate climates. Rev. Fac. Agron, 35, 248-269. * Miralles de Imperial Hornedo, R., Delgado Arroyo, M. M., García Manso, Á., González Gullón, M. I., & Martín Sánchez, J. V. (2017). Efecto del residual de estiércol avícola o residual de fertilizante mineral en el rendimiento y la calidad de camelina (Camelina sativa L. Crantz). Revista mexicana de ciencias pecuarias, 8(4)