Se viene AAPRESID 2024, un Congreso con muchas novedades. Tuvimos la oportunidad de conversar con su presidente, Marcelo Torres, para que nos cuente cómo están viviendo la previa de este Congreso que será según su propio slogan “el lugar donde se escribe el futuro del agro”
Por: Sebastián Nini
Marcelo ¿Cómo fue este último año de la presidencia de AAPRESID?
Bueno, fue un año lleno de actividad, lleno de desafíos para la institución, donde tuvimos que trabajar mucho, con entusiasmo, con oportunidades de corto y largo plazo, tanto locales como globales. Un año intenso, donde creo que el principal desafío es tener un buen balance entre una mirada estratégica de mediano y largo plazo, pero también tener los pies en la tierra y ver lo que está pasando hoy. Inclusive balancear respecto de la oportunidad que tiene la Argentina, de ser referente en la transformación de la agricultura global, por el nivel de avance y de adopción que tenemos en siembra directa, en rotación de cultivos, en uso de cultivos de servicios, respecto al mundo que tiene que ir en esa dirección. Pero repito, buscando siempre el equilibrio y el balance entre atender las urgencias del corto plazo y poder prepararse para capturar esta oportunidad.
¿Cuáles son las problemáticas que últimamente van surgiendo?
Estábamos haciendo un recuento el otro día, tenemos 167 productos técnicos este año. ¿Qué quiere decir 167? Se trata de problemáticas planteadas por el productor, trabajando en escenarios reales de producción. Mostrándolas, muchas de ellas, en 30 jornadas a campo que tienen que ver con las UPA.
Estamos involucrados en el tema más urgente, el achaparramiento del maíz y seguimiento de la población de chicharritas. Trabajando en la red de maíz también, en comportamiento de los híbridos respecto de chicharritas.
Es decir, son líneas de corto plazo, líneas inmediatas. También proyectando un poco qué pasa en el mundo en este contexto donde hay tanto foco puesto en el impacto ambiental y donde Argentina tiene una gigantesca oportunidad para capturar.
Hablando de preocupaciones, ocupaciones, miradas de largo y corto, obviamente en el corto, ¿preocupa la situación del agro argentino y del país en general?
Entendemos y vemos que hay acuerdo con el rumbo, pero manejar esta transición es complejo. Estamos para apoyar, y en esa línea también nos preocupa el avance de la labranza, que es producto también de esta mirada de corto plazo. También podemos entender que el productor se siente en un combate muy complejo y va avanzando como puede y a veces se pierde un poco la mirada del mediano y largo.
¿Qué desafío supone para Aapresid el avance de la labranza en el campo argentino?
Entendemos que la coyuntura es complicada, estamos absolutamente conscientes de eso. Respecto al avance de la labranza, creemos que ya en Aapresid estaba el instituto, un instituto de Aapresid, que esto promovía un poco la mirada, un poco no, mucho, la mirada sistémica para poder atajar, atacar algunos problemas productivos como compactación, malezas, desde la mirada del sistema. Bueno, hemos reeditado el instituto Aprender con esta mirada, de dar respuesta al avance de la labranza, que estamos viviendo con preocupación en Argentina.
¿Qué novedades implicó esta alianza con Exponenciar para trabajar en el Congreso AAPRESID?
Aapresid tiene una historia repleta de alianzas. Siempre fue de construir redes y sinergias. Y bueno, estamos caminando el primer año junto a Exponenciar, donde hay aprendizaje de ambos lados. La cultura de, en este caso, los dos actores es bastante distinta.
Siempre se producen grandes oportunidades de sinergia, pero también hay un aprendizaje en cómo hacer esa sinergia, dentro de culturas muy diferentes. Aapresid, una organización de productores, con esa idiosincrasia; Exponenciar, con mucho expertise en la parte de organización de eventos de agro y que suma su gran capacidad de contacto con empresas, con gobiernos, nacionales, provinciales, locales.
“Hemos reeditado el instituto Aprender con esta mirada, de dar respuesta al avance de la labranza, que estamos viviendo con preocupación en Argentina”
¿Cómo se puede sinergizar estas dos miradas?
En algunos casos son muy similares, en otras diferentes, pero afirmo que Aapresid y Exponenciar logran potenciarse. Este año que tenemos el gran desafío de ir a Buenos Aires y con un Congreso que, si uno toma los metros cuadrados involucrados, estamos cerca del triple respecto de nuestro último Congreso en Rosario.
Existe una mística alrededor de AAPRESID en Rosario en el mes de agosto. ¿Eso se sintió al decidir este cambio? ¿Cómo esperan suplantar esa sensación al asistente al Congreso?
La primera cosa para aclarar respecto de Rosario es que esta decisión no tuvo que ver con ninguna connotación negativa respecto de Rosario. Tuvo que ver con que ya la Institución tiene un mandato de itinerancia, de llevar la voz del Congreso, la voz de la comunidad agroalimentaria, a distintas plazas. Nos hemos ocupado de aclararlo en cada una de las entrevistas que hemos hecho. Inclusive esta decisión fue tomada antes de la alianza con Exponenciar. Es decir que Exponenciar tampoco tuvo que ver con esta decisión.
¿Cuál es la cantidad de inscriptos que se esperan?
Nosotros aspiramos a tener entre 8.000 y 10.000 asistentes, pensando desde luego en presencial independientemente de la gente que lo siga por streaming.
Este año también el streaming va a ser especial, va a ser un compendio de las charlas que se están dando, una síntesis, entrevistas, no va a ser como años anteriores que uno podía seguir en vivo la charla taller por taller – eso va a estar disponible en los canales de la institución una vez que termine el Congreso-
¿Qué cantidad de expositores se han sumado comparado con años anteriores?
Este Congreso que va a ser el triple de grande en superficie comparado con el último que realizamos en Rosario. Esa opción es importante porque podemos desplegar un montón de propuestas de todo tipo. Vamos a tener cerca de 150 empresas, contra cerca de 108 que tuvimos en Rosario. Esto es un crecimiento bastante grande y esa posibilidad la da una plaza y una sede, como es la Rural de Palermo, donde tenés más metros cuadrados por explorar. No quiere decir que esto no se pueda hacer en otros lados, por supuesto que sí. Habría que pensar en el caso de Rosario, de Córdoba, bueno, dónde podemos hacer un Congreso que tenga esta superficie, ¿no?
“Este Congreso que va a ser el triple de grande en superficie comparado con el último que realizamos en Rosario”
Mas allá de la decisión de cambiar la sede para este 2024, Buenos Aires ofrece una paleta de servicios mayor a la de Rosario. Esto es un plus, seguramente. ¿Los expositores lo valoran a la hora de armar un evento propio en el marco del Congreso como suele ocurrir en Rosario?
Bueno, hablando de los servicios de la Ciudad de Buenos Aires respecto del interior, hay pros y contras, ¿no? Todos tienen ventajas y desventajas. Una ventaja de Buenos Aires es la conexión aérea más directa, lo que permite facilitar el acceso a algunos disertantes y asistentes tanto internacionales como nacionales.
En hotelería y gastronomía habrá una amplia oferta. Las empresas, al igual que en Rosario, van a hacer también lanzamientos particulares y en Rosario hay excelentes oportunidades, pero en Buenos Aires también, digamos, en eso vemos que las dos plazas son muy buenas.
¿Cuáles son las expectativas que tiene la organización? Hay muchas novedades como los Ejes temáticos del Congreso
Propongo hacer un recorrido por los ejes temáticos que presentará el Congreso, hay que aclarar que en cada uno de estos ejes hay un grupo de socios y equipos de Aapresid que trabajan en ver cómo se estructuran, qué charlas que se dan, qué disertantes se convocan, los paneles que se conforman, etc.
Los ejes son Productivo Ambiental, donde tenemos dentro de ese eje los sub-ejes de Agricultura Regenerativa, Manejo de Cultivos, Salud del Suelo y Cambio Climático, Sistemas Integrados Agrícola-Ganaderos.
En el eje social tenemos Comunicación y Educación, QUO VADIS, que es un espacio que nació en el 2008, cuál es nuestro proyecto de país, y cómo todos podemos contribuir a eso, invitar esa mirada de largo plazo, que vemos que en otros países, a pesar de cambiar de gobiernos con distintos signos políticos, a veces bastante marcados, hay un rumbo general bien definido, y creo que eso nos falta en Argentina, seguramente esto se va a abordar en QUO VADIS donde vamos a hablar de representatividad, campo-ciudad, y nos parece importante también ver Desarrollo Federal.
Políticas Públicas es otro eje dentro de lo social; en el eje económico también vamos a hablar de Bioeconomía. En el eje tecnológico tenemos sub-eje Agtech y Digitalización, Maquinaria Agrícola, Biotecnología y Manejo del Agua. En la mayoría de estos ejes, siempre estamos invitando a que participen, como dije, socios, equipos de Aapresid, instituciones, facultades, el INTA, y también las empresas, porque creemos que las empresas tienen que estar en la discusión de estos temas.
La idea es entre todos construir una mirada respecto a los ejes que acabo de enumerar.
¿Para próximos años, la idea es seguir rotando las sedes, quedarse en Buenos Aires o volver a Rosario?
Este año se concretó la sede en el predio de la rural de Palermo, pero esto no implica que está decidida la sede de 2025. No tenemos ninguna decisión tomada todavía y no creo que lo hagamos hasta después del Congreso respecto de dónde va a ser la edición 2025.
Hay aspectos para considerar sobre Buenos Aires y el interior también. Aspectos positivos, aspectos negativos, fortalezas, debilidades, obviamente que hacer el Congreso en el Interior es más cómodo para un montón de productores, asesores, empresas que tienen su actividad económica en el interior del país, etc.
¿El interior productivo en el medio de la ciudad es muy significativo, no te parece?
Si, esta edición en Buenos Aires nos da la posibilidad de llevar la voz del interior, la voz del desarrollo federal a la ciudad. Entendemos la mirada, pero también creemos que es una oportunidad para llevar esto, ¿no? la pujanza, la fuerza, los valores que tiene muchas veces la gente que vive en el interior y trabaja en contacto con la naturaleza, llevar esta agenda a la gran ciudad, nos parece que también es una oportunidad.
Gracias Marcelo!