Una nueva apertura de año para la Soja en un escalón de precios menor al de los años anteriores.
Lic. Sebastian Salvaro – Co-Founder y Director Simpleza SA
Hemisferio sur de la mano de Brasil y Argentina será el epicentro de lo que pueda pasar con el precio de Soja. Empezó la siembra con datos menos alentadores que años anteriores, pero con un largo camino por recorrer, ¿cuál podría ser el escenario posible?”
Ya mediados de septiembre y el hemisferio sur enciende los tractores para comenzar la siembra del cultivo insignia que es la Soja. Tomando datos de USDA, la suma de Brasil, Argentina, Paraguay, Bolivia y Uruguay será de casi 240 mill de tn. Más de 55% del volumen total a producir que se estima en 430 mill de tn. Aquí la primera diferencia con el año anterior, y que explica parte de la baja que hemos visto en los precios y es de 35 mill más de producción.
Como se ve en el gráfico, lejos estamos de precios de Soja del año 2022 y parece que estamos con cierta volatilidad y con un canal más parecido a 2017-2018.
La pregunta que todos nos hacemos es, ¿será este precio el piso de la Soja? Difícil saberlo, pero parece que los datos bajistas en general ya están tomados, se alinea, como dijimos antes, la proyección de producción sumado a cuestiones financieras haciendo que los fondos de especulación hayan llegado a tener la posición vendida en valores récord sumado a una China que venía muy tranquila en sus compras. Como todas estas noticias siempre son cíclicas, lo que vemos ahora es justamente la inversa.
Temas financieros
Viene afectando la baja de tasas de interés anunciada por la FED y consecuentemente los fondos han salido a recortar sus posiciones vendidas y esto es una compra ficticia pero que tiene impacto, volatilidad en los precios de estas semanas.
Luego, vemos algunas compras China se reactivan y el principal factor, que según mi mirada será relevante en esta campaña, el CLIMA, viene dando escasas lluvias sobre todo en Brasil.
Queda por saber dos variables concretas en dicho país. La primera es área y la segunda es rendimiento, según Conab estima una siembra de 47,4 mill de hectáreas, casi 1,5 mill de has más que el año precedente con un rendimiento 10% arriba del año anterior, pasando de 147 a 166 mill de toneladas y siendo este país el que explica gran parte del saldo de producción.
Por último, para cerrar la oferta argentina daría un salto también a 51 mill de toneladas, influenciada por una mejora en rendimientos y una mayor área por el impacto de chicharrita en maíz, dejando algo más de área a la oleaginosa.
Como se detalla, gran parte de la futura oferta de soja está en manos del hemisferio sur y deberá ser el clima en una primera instancia quien defina cuál será el piso de precios, pero también la demanda de granos y aceites mundial.
Como todo lo antes dicho no es lineal, tanto oferta como demanda, tenemos que seguir bien de cerca cual será el comportamiento de venta de los productores, ya no argentinos sino mundiales, porque si bien podemos leer que oferta vamos a tener, hay que detallar cuál es la disponibilidad de esta, lo viene demostrando muy bien Argentina, pero también pasa lo mismo en el resto de los países productores.
Argentina
Por el lado del productor argentino, se deja ver que a estos valores tanto disponibles como futuros no quiere tomar decisiones de venta. En el escenario de bajos precios, menor inflación y expectativas de normalización macroeconómica, prefiere el grano y esto viene colaborando a los precios pagados aquí versus el de los competidores.
Es simplemente un capítulo de un libro que tenemos que escribir, será un año largo para toda la cadena agroindustrial y el productor en particular.