Por: Paula Broglia, Paula Piccolo y Dante Romano.
Análisis de Mercado Fyo
En las últimas semanas el precio del trigo registró un importante avance en la plaza local, tocando un valor máximo de $ 2720 por tonelada, para sufrir luego un leve rebote. Frente a este comportamiento, muchos se debaten entre vender pensando que la suba que esperaban ya se dio, o continuar esperando, teniendo presente la experiencia del año pasado, cuando se tocaron los 200 U$S/tt.
Este año se repitió la situación de precios bajos al momento de la cosecha. El trigo llegó a costar 140 U$S/tt con un precio de 163 U$S/tt para julio, lo que junto con buenas condiciones crediticias llevó al productor a guardar el trigo para más adelante. Pero a diferencia de aquel año cuando hubo que esperar a mayo para ver subas, ya estamos viendo alzas. Si nos guiamos por el razonamiento de que la historia se repite, habría que seguir esperando. Sin embargo, hay una cuestión de espacios y logística para considerar, y es que en marzo arrancará la trilla de maíz y soja, y las instalaciones fijas serán necesarias para mover la cosecha gruesa.
Para entender el mercado del trigo, es necesario comprender su estructura. La cosecha este año es de 15 mill.tt. Por el lado de la demanda el consumo interno utiliza 6,5 mill.tt., mientras que Brasil necesitaría importar 5,0 mill.tt. Esto genera un remanente de unas 3,5 mill.tt. que deberían colocarse en otros países.
Los molinos llevan compradas 1,4 mill.tt. de trigo. Sus compras son chicas y periódicas, por cuestiones logísticas y financieras. Pero los exportadores son más agresivos. Ya llevan declaradas exportaciones por 5,1 millones de toneladas. Viendo los destinos de los embarques, podemos estimar que un 25% de esto correspondería a Brasil. Por lo que unas 1,3 mill.tt. se habrían vendido a ese país, mientras que el resto, unas 3,8 mill.tt. serían para otros destinos. Como vemos la cuota que le correspondería a estos está excedida. Por ello alguien va a tener que ajustarse, o bien el consumo interno baja o lo hace Brasil.
Este debate se soluciona con precio. Brasil está levantando el precio FOB, para dejar al trigo argentino fuera de competencia en destinos no tradicionales. Como el trigo argentino puesto en Brasil llega 50 U$S/tt más barato que el de EE.UU., hay espacio para que esto suceda. Por ello se está produciendo la suba de precios FOB Argentino, incluso a contramano de la tendencia internacional.
Ahora bien, si vemos lo que ocurrió el año pasado, los precios despegaron cuando Brasil se convirtió en el destino del 80% de los embarques de trigo. Esto todavía no está pasando, así que hay espacio para subas más importantes.
Otro dato interesante es que las compras de los exportadores exceden a las ventas en 1,5 mil.tt. Esto nos da un indicio de que los traders esperan una suba.
Retomemos así la pregunta inicial de si el precio del trigo a nivel local ha alcanzado un nivel interesante para vender. Particularmente, se recomienda esperar un precio más cercano a los U$S/tt 180 para iniciar las ventas, pero hay que tener en cuenta que hemos tenido valores que no estuvieron muy lejos de esa marca, y los mismos son muy inestables, con exportadores que de repente entran al mercado para completar buques, pero que luego de pronto calientan el mercado.
Adicionalmente, si bien hay mucha tela para cortar, y existe un potencial de alza, el mismo no será ilimitado. El año pasado cuando los compradores lograron originar suficiente cereal para cubrir su programa de embarques, los precios del trigo cayeron fuertemente. Por ello, tampoco podemos permanecer indiferentes al mercado cuando llega la suba.