Comenzó hace 50 años en su Chacabuco natal junto a su padre. Conoce muy bien las palabras esfuerzo, resiliencia y pasión por la producción y prestación de servicios a terceros.
Hoy Luis Zarkovich es un verdadero ejemplo en la localidad y siembra junto a su socios 5500 hectáreas multiplicando genética Enlist, con un moderno parque de maquinaria agrícola.
Por: Diego Peydro – Director de AgroTV
La relación de Luis Zarkovich con el campo viene desde sus 12 años cuando acompañaba a su padre en el criadero de cerdos y jugaba entre las máquinas en Chacabuco. En los 90 quebró la empresa y perdieron casi todo. Hoy produce 5500 hectáreas junto a sus Socios con genética Enlist y un moderno parque de maquinarias. Esta es la historia de un hombre apasionado que comenzó siendo maquinista de grandes empresas que luego se convertirían en sus propios clientes. Evolución a puro esfuerzo
Contanos Luis sobre esta zona donde desarrollas tu trabajo
Acá estamos en Chacabuco, en el cuartel quinto, es lo mejor de esta zona. Empecé hace aproximadamente 50 años como contratista con mi papá, después nos fue mal, vendimos todos los fierros – estuve a punto casi de vender el campo – pero empecé a trabajar con DonMario y ahí empezó a mejorar el panorama. Ellos me alquilaron el campo por 5 años, ¡pagué las deudas que tenía y te podría decir que ahí empecé de nuevo! Más tarde con Gerardo Bartolomé alquilamos un campo juntos y empezamos a participar a porcentaje.
¿Cómo es la actualidad de tu planteo productivo?
Los años fueron transcurriendo, dejé de ser contratista y ahora alquilo casi todo para mí y un grupo de amigos que tengo. Estamos en la zona núcleo de Chacabuco, el trigo anduvo muy bien, tuve lotes de 7300 kg y también de 5500. Se dio el año con lotes muy bien rotados. La secuencia fue trigo- maíz – soja de primera, hicimos colza también camelina, algo de girasol y un poco de sorgo.
“Nuestro caballito de batalla es Catalpa, es el que mejor anduvo”
¿Luis y cómo está conformado hoy el equipo de fierros y sobre todo la elección genética para llevar adelante este trabajo?
Como contratista llegué a tener cuatro cosechadoras, tres sembradoras, cuatro tractores, pero la vida me golpeó con un accidente muy grande y ahí decidí unificar maquinaria. Me quedé con una sembradora y dos grandes cosechadoras; también capacité a la gente y gracias a ellos tenemos todo lo que tenemos.
Estamos trabajando junto a mis socios entre 5000/5500 has.cuando veo que no alcanzo a cubrir el trabajo, traigo máquinas de afuera.
En este momento están cosechando con una máquina de Última Generación este trigo de gran potencial. ¿Qué clase es y qué tecnología está incorporando para poder seguirla en tiempo real y desde el celular?
Tenemos una John Deere 790, la compramos para la gruesa, una clase 9 con un motor JD de 600 y pico caballos equipado con toda la telemetría que tiene la marca. La misma maquina se va programando, según donde rinde más donde o menos. Estamos muy conformes, esta vez hicimos 3700 de gruesa y unas 1700 hectáreas de trigo. El cabezal tiene un draper de 45 pies y la estamos usando con maicero de 22 surcos y ya anda muy bien.

¿Cuál es la capacidad operativa que tiene esta potente máquina con toda esta tecnología embarcada y un draper de 45 pies?
Esta máquina nos permite arrancar a las 9 de la mañana en trigo y parar recién a las 2 o 3 de la madrugada; en soja igual de parecido, empezamos a las 10 de la mañana con equipos húmedos y trabajamos hasta las 10 de la noche…muchas veces desenganchamos el cabezal sojero y nos vamos a maíz hasta las 3 o 4 de la mañana, hacemos doble turno. Esta máquina está haciendo 130/140 hectáreas en trigo, 100/120 en maíz y 120/130 en soja.
¿Cuáles son las tolvas que la acompañan y cómo seleccionan el equipo de siembra para poder dar respuesta a las 5500 hectáreas que trabajan cada campaña?
Tengo dos tolvas grandes para maíz de 33000 kg y en Sembrador tengo una Apache 918, una 99000 nueva y un prototipo que me van a dar para probarla.
Para Zarkovich la relación con Gerardo Bartolomé y la empresa DonMario fue determinante en el crecimiento y evolución de la empresa familiar
DonMario para mí es como una familia, hemos arrancado laburando y alquilando campos juntos. Han crecido tanto que invierten en Brasil y en otros países. Yo multiplico semillas para ellos y me siento como uno más de la familia. Se merecen todo lo bueno que han hecho, invirtieron en genética y en investigación.
Ellos saben escuchar nuestros problemas y siempre ven cómo solucionarlo, eso es bueno para el productor. En trigo hemos sembrado Catalpa, anduvo muy bien, con lotes de aproximadamente 7000 kilos, también sembramos Pehuén, Aromo, Alerce. Nuestro caballito de batalla es Catalpa, es el que mejor anduvo.
“Estamos usando mucho la 47E23 Enlist, que nos ayuda a controlar los problemas de malezas”
¿Y hace cuánto tiempo venís sembrando las sojas de DonMario y cómo ves la evolución en rendimiento y manejo de la genética y la biotecnología?
Hace 30/35 años que trabajo con DonMario, hemos arrancado con las DM48 / DM49, las 3700 y ahora llegó toda esta tecnología que es muy buena para la soja, estamos usando mucho la 47E23 Enlist, que nos ayuda a controlar los problemas de malezas. El año pasado nos fue muy bien, llegamos a los 5000 kg aproximados. La tecnología Enlist hace que sea más fácil el manejo y control de malezas.
Esta nueva campaña vamos a ir a maíz de primera – casi nada se hizo por el tema de la chicharrita – pero yo respeto cómo se plantea la rotación y voy a hacer maíz de segunda también. En soja estamos haciendo soja de segunda, usando DM46E21, DM33R22 y después hicimos la DM47E23, esa anduvo muy bien también.

Zarkovich analiza la importancia de hacer frente a las deudas y agiornarse en la incorporación de nuevas tecnologías tanto en insumos como en maquinaria
Hemos tenido años complicados, con seca, con heladas, hemos perdido el trigo, la soja tuvo poco rinde…pero enfrentamos los problemas, sacamos créditos, hablamos con cooperativas y encaramos la solución laburando.
Hay que seguir apostando y para eso estamos, es lo que sabemos hacer. Uno debe estar en las buenas y en las malas, invirtiendo en el mejor fierro, cambiando las maquinarias para no quedarse atrás y en genética ir por lo mejor, ¡eso hace que uno forme un buen equipo!
Gracias Luis!
