Por: Sebastián Salvaro, co-funder y director de AZ Group
Brasil con récord de producción, Argentina con incertidumbre productiva y Estados Unidos que está por comenzar a sembrar el ciclo 2021/22 con los stocks más ajustados de los últimos años, ¿Qué puede pasar en el mercado de soja?
Arrancamos el 2021 con precios internacionales que no veíamos desde hacía 7 años, con una soja que cotiza en Chicago en torno a los 510 usd/t, e inclusive por momentos ha llegado a superar los 520 usd/t. Uno de los principales factores que llevaron a este incremento de precios es la escasez de oferta en el mercado. Estados Unidos lleva vendido el 99% de su proyección de exportación de 61,2 mill. de t. del ciclo 2020/21 cuando aún restan seis meses por delante de ciclo comercial. Y, por otro lado, Sudamérica aún no termina de definir su producción.
En Brasil, la producción alcanzaría 135,1 mill. de t por encima de 133,8 mill. de t estimados en el mes de febrero, por la Conab. Este incremento se debe a un aumento de área que pasó de 38,2 a 38,4 mill. de ha. Este volumen sorprende al mercado, no sólo porque sería un volumen récord para el país sino porque sigue presente el retraso en la recolección de soja y, por ende en el volumen de exportaciones de Brasil en momentos de alta escasez de oferta en el mercado de la oleaginosa.
Estados Unidos está presionado dado que el stock final se proyecta en 3,3 mill. de t., si falla en su producción esto podría afectar al mercado de la soja.
Salvaro
Como se observa en el gráfico, la Conab estima un volumen de exportación de 86,1 mill. de t, superando 83 mill. de t del ciclo anterior. Uno de los principales demandantes de esta soja se espera que sea China.
En Argentina, la falta de precipitaciones del último mes generó una baja es la proyección de cosecha. Según datos publicados por la BCR, la cosecha alcanzaría 45 mill. de t desde 49 mill. de estimados en el mes de febrero. Esto se debe a que las lluvias faltaron en momentos de llenado de la soja de primera, en gran parte de las regiones productivas del país y, en pleno desarrollo de la soja de segunda.
Sin embargo una disminución de la producción no será sinónimo directo de reducción de la oferta disponible, por el carry over del ciclo anterior. Dado que hay un remanente de alrededor 8,5 mill. de t del ciclo 2019/20. Este carry es producto de los paros de transporte y los conflictos gremiales en los puertos e industrias durante diciembre redujeron la molienda de soja.
Todo estos factores arrojan una incógnita en el mercado, ¿pato o gallareta? La entrada de la oferta desde Brasil, con la producción récord que se espera, genera baja en el mercado pero hay que ver que sucede con la siembra de Estados Unidos del ciclo 2021/22. El USDA estimó en febrero un incremento de área frente al ciclo pasado, pero ya hay mapas que muestran un comienzo de sequía en los principales estados productores. Estados Unidos está presionado dado que el stock final se proyecta en 3,3 mill. de t., si falla en su producción esto podría afectar al mercado de la soja.
Concluyendo, vemos que la actividad relacionada al análisis de los mercados esta siendo al menos divertida pero extremadamente riesgosa ya que existen gran cantidad de variables que tenemos que tener presentes para realizar una buena prospectiva. Para no caer en errores del pasado es que siempre decimos que la solución no está en la respuesta que el empresario pueda tener, ya sea productor agropecuario o gerente de alguna otra compañía dentro de la cadena agroindustrial, sino en la formulación de preguntas que generen reflexión y acción. Te dejamos para que vos puedas construir las tuyas.