En esta oportunidad conversamos con César Martínez, emprendedor y fundador de Rastro, una empresa que vino a mejorar la manera en que el productor compra y vende maquinaria agrícola a través de internet.
Por: Juan Alaise – Periodista
César nació en Los Toldos y se instaló en la ciudad de Junín con el objetivo de potenciar su negocio. El director comercial de Rastro nos compartió su mirada sobre la adaptación del productor argentino a las nuevas tecnologías y cómo su empresa colabora con este viraje digital.
¿Cómo es tu nombre y a qué te dedicas?
Mi nombre es César Martínez, soy de Los Toldos, un pueblo acá cerquita de Junín. Me dedico a hacer negocios por Internet. Soy fundador de Rastro y además director comercial.
Somos una plataforma para comprar y vender maquinaria agrícola por Internet. Hoy ya estamos trabajando en 17 provincias de Argentina, tenemos algunos clientes en Bolivia, otros en Paraguay.
Estamos desarrollando no solamente negocios, sino también tecnología para mejorar los negocios en el sector agropecuario, dándole valor tecnológico y digital, no solo a nuestra empresa, sino también a nuestro ecosistema, acompañando la transformación digital del agro.
“El productor argentino siempre fue un adoptador serial de tecnologías”
Te escucho y mencionás al mismo tiempo en tu respuesta la palabra agrícola e Internet. ¿Qué relación encontrás entre esas dos cosas?
Muchas y cada vez más. Por un lado, el sector agropecuario no escapa al fenómeno global que está ocurriendo con el e-commerce. La agricultura, siempre fue un sector que estuvo muy permeable a las nuevas mejoras tecnológicas.
Siempre usó la tecnología para recibir y generar información que le permite tomar mejores decisiones. Y, por otro lado, Internet agilizó y simplificó procesos a partir de los cuales esa información corre, tanto a nivel negocio como a nivel operatividad, dentro de una maquinaria agrícola o dentro de un mercado.

Tal como se maneja la documentación de las empresas, hoy prácticamente todo está en Internet.
Es mucha la relación que hay. Principalmente, si tuviera que dar un ejemplo, es el de una maquinaria agrícola que hoy, a través de lo que es telemetría y desarrollo de hardware para medir el rendimiento, permite que una persona desde un teléfono celular o desde una computadora, en cualquier lugar del planeta, pueda estar viendo el resultado del trabajo que está generando esa máquina.
Viéndolo desde el lado de mi negocio, particularmente creo que es un fenómeno que se empezó a desarrollar o que empezó a tomar una masa crítica hace aproximadamente 15 años, donde se empezó a ver los primeros indicios de la comercialización de maquinaria agrícola por Internet.
La dinámica de la venta es más compleja que otros sectores, no te parece?
Estamos en un sector que por el volumen y por la plata de las transacciones generalmente requiere de la venta consultiva, de la interacción entre comprador y vendedor. Más de una vez requiere de reuniones, siempre intervienen bancos, concesionarias, importadores y organismos públicos, llegado el caso. Si bien son operaciones que requieren de humanidad o de interacción, se están simplificando mucho. Justamente uno de nuestros slogans es brindar la tecnología justa para el sector agropecuario.
¿A qué te referis con ese slogan?
Entendiendo que la tecnología justa no es necesariamente toda la tecnología de disposición del productor, sino la que necesita para tomar decisiones sin sobrecargar lo de digitalización, que al final del día sería un poco efímera, ¿no? Sino estar con la información, el contenido y los procesos que realmente hacen más dinámico el negocio, pero no con la sobrecarga de tecnología.
¿Y cómo definirías a qué se dedica Rastro?
Rastro es una plataforma para comprar y vender maquinaria agrícola que une las partes en internet. Trabajamos con vendedores, concesionarios, fábricas, importadores. Por otro lado, brindamos un asesoramiento personalizado co-creando, ayudándolos a co-crear el negocio, entendiendo las necesidades y buscándole las mejores opciones para que hagan inversiones productivas.
Recién mencionabas que para hacer una transacción agrícola de maquinaria intervienen bancos, hay créditos, hay muchas reuniones. ¿Cómo se lleva todo eso al plano digital?
Bueno, la mayoría de la parte informativa está en el plano digital. Hoy trabajamos a través de plataformas, donde podemos traccionar directamente los créditos de nuestros clientes. Estamos accediendo a precalificaciones inmediatas.
Todo lo que es la documentación está digitalizada. Todo se hace prácticamente de manera digital, salvo casos puntuales donde se interviene una prenda o donde sí o sí se requiere de alguna interacción entre el cliente y el banco, o entre el proveedor y el banco.

Desde tu lado, como emprendedor digital, ¿cómo ves al productor argentino? ¿Crees que se está adaptando a esta digitalización?
Al productor argentino realmente lo veo con una admiración enorme. Primero, porque más allá de la adaptación a esta tecnología a esta nueva era digital, siempre fue un adoptador serial de tecnologías. O sea, los grandes cambios que ocurrieron en la agricultura en los últimos 40 años son cambios realmente relevantes que tuvieron impacto no solamente en Argentina, sino también en la región e inclusive en Asia, África y Europa.
Es realmente un implementador de tecnologías. El caso más relevante, sin dejar de lado obviamente la nueva era digital, es el hecho de la implementación de la siembra directa. Por ejemplo, fue un suceso que realmente cambió la forma de hacer agricultura, de generar granos en Argentina.
“Rastro es una plataforma para comprar y vender maquinaria agrícola que une las partes en internet”
Con respecto a lo que es la tecnología digital, ¿cómo ves al productor argentino?
Tranqueras adentro, en cuanto a productividad y a la agricultura en sí misma, con la implantación, el cuidado y la cosecha, es realmente un usuario muy maduro de tecnologías. Tranqueras afuera, todo lo que tiene que ver con servicios que hacen que el productor interactúe con diferentes jugadores, en este caso con Rastro o con empresas de logística o con plantas de acopio o con corredores, se ha abierto mucho a la posibilidad de evaluar nuevas opciones, lo está adaptando más.
¿Qué significa para vos como emprendedor a través de Rastro, en este 2025, ser parte de ese cambio digital para el campo argentino?
Un desafío, que lo tomamos con muchísima responsabilidad. Apuntamos a la excelencia y a una motivación muy grande de tratar de brindar lo mejor, de ser creativos, de entender que hay mucho por hacer y eso justamente nos desafía mucho y nos carga de responsabilidades. Además, disfrutando el camino – hay mucho por hacer – y está bueno crear y luego validar, pero entendiendo que es un desafío enorme por el hecho de que estamos, en cierta medida, abriendo caminos.
Hablando de desafíos, ¿cuáles crees que pueden ser los desafíos que tenga Rastro de acá en adelante?
Podemos hablar de desafíos internos, de desafíos externos, de desafíos de corto, mediano y largo plazo. De acá en adelante Rastro seguirá trabajando para continuar creciendo en ventas, llegando a nuevos lugares, creciendo en marca y desarrollando sistemas internos que nos permitan simplificar procesos, para poder automatizar procesos que nos sirvan de trampolín para una escala.
Por otro lado, el gran desafío es ser parte de la transformación digital del agro, entendiendo que es muchísimo el valor que le podemos dar a los jugadores de nuestro ecosistema. Realmente los desafíos son un montón, creo que el principal es seguir aportando a la transformación digital del agro y al ecosistema que se está creando alrededor nuestro.
Me decías al principio que sos de Los Toldos y que te mudaste a Junín por una cuestión estratégica. ¿Cómo te recibió la ciudad?
Muy bien. Junín es un lugar que realmente tiene un potencial enorme desde un montón de puntos de vista. Geográficamente Junín está ubicada entre rutas que unen prácticamente el país. Tenés el caso de la 7, que une Argentina de este a oeste. Tenés el caso de la 188, que corta la provincia de Buenos Aires y termina uniendo Santa Fe con La Pampa.
Pero además, demográficamente, al tener volumen de personas, universidad, ecosistema financiero y bancario, etc. es un lugar para aprovecharlo y para realmente pensar en crecer en escala.

Te hago una última pregunta y no te quito más tiempo. ¿Qué es Rastro para vos?
Para mí, personalmente, Rastro es un proyecto con una visión muy clara. Es en cierta medida el repositorio en el cual aterrizaron un montón de ideas, de trabajos, de investigaciones y de formación.
Realmente va a ser la plataforma líder de negocios del sector agropecuario. Estamos trabajando para eso. Y después, obviamente, a nivel sentimental, por decirlo de alguna manera, es una creación propia a la cual le dedico mucho tiempo. Disfruto del camino, entendiendo que nada es color de rosa, sino que hay mucho esfuerzo, mucho sacrificio, mucha resiliencia.
César, muchísimas gracias!