En un contexto empresarial cada vez más competitivo, especialmente en el dinámico sector agropecuario argentino, la efectividad organizacional depende menos de la ejecución individual y más de la capacidad de orquestar estratégicamente los recursos humanos y materiales.
Por: Lic. Alberto Galdeano – Co-Founder y Director Simpleza SA
La pirámide organizacional moderna se sostiene sobre una distribución inteligente de roles, donde cada nivel tiene una responsabilidad única en la construcción del éxito empresarial. Esta arquitectura de liderazgo trasciende el simple “hacer” para convertirse en un sistema de “hacer hacer” que potencia la eficiencia y la innovación.
En la cúspide, el directorio asume un rol fundamentalmente estratégico.
No se trata ya de intervenir en la operación, sino de trazar el rumbo, definir la visión de largo plazo y establecer los lineamientos que guiarán a toda la organización. Su mirada debe ser panorámica: anticipar tendencias del mercado agrícola, climáticas y tecnológicas, evaluar riesgos político-económicos que impactan en los negocios y definir el posicionamiento competitivo. Por otro lado, tiene un rol fundamental de supervisión y control de la capacidad de ejecución que posee el gerente general a quien el directorio le asigno la implementación de las estrategias.
“A medida que la organización crece, la necesidad y capacidad de delegación aumenta”
La gerencia general opera como el traductor de esta visión estratégica. Su misión es “hacer hacer”: convertir los lineamientos abstractos en planes concretos, coordinar los recursos entre áreas y garantizar la alineación de los equipos hacia los objetivos corporativos. En el sector agropecuario, esto implica gestionar variables complejas como las finanzas, los impuestos, la logística, el abastecimiento, las operaciones, la comercialización, a lo que se suma el clima y las fluctuaciones de mercado.
Las gerencias de área se mueven en un espacio híbrido de “hacer hacer” y “hacer”. Implementan estrategias específicas, desarrollan planes tácticos y supervisan la ejecución. La optimización de procesos y la eficiencia de las rutinas sus responsabilidades claves.
Mandos medios
Los mandos medios representan el engranaje fundamental entre la estrategia y la operación. Alternan entre “hacer” y “hacer hacer”, ejecutando tareas operativas y gestionando equipos. Son los responsables de transformar las directivas generales en acciones concretas, manteniendo la comunicación fluida entre la dirección y los niveles operativos.
Operarios
Finalmente, los operarios son los ejecutores directos. Su función es “hacer”: llevar a cabo las tareas específicas con precisión y eficiencia. En el contexto agropecuario, representan quienes trabajan directamente en el campo, operan maquinaria, mantienen cultivos o manejan la producción ganadera.
Directorio: PENSAR
Gerente General: HACER HACER
Gerentes de Área: HACER HACER y HACER
Mandos Medios: HACER y HACER HACER
Operarios: HACER
¿Ser multifuncional o delegar?
Sin embargo, es fundamental reconocer que esta sofisticación organizacional requiere escala. La definición precisa de roles, la especialización de funciones y la implementación de procesos estructurados solo son viables cuando la empresa alcanza un volumen crítico de operaciones. En empresas pequeñas, estos roles se superponen y las personas deben ser multifuncionales. A medida que la organización crece, la necesidad y capacidad de delegación aumenta y surge así la necesidad de una división más clara de responsabilidades, permitiendo una gestión más eficiente, especializada y estratégica.
“La clave está en la flexibilidad, en comprender que los roles pueden adaptarse según la complejidad de los desafíos”
Esta arquitectura organizacional no debe ser estática, sobre todo en el contexto en el que operan las empresas agropecuarias argentinas, la clave está en la flexibilidad, en comprender que los roles pueden adaptarse según la complejidad de los desafíos, en el volumen de los negocios que gestionamos, en la posibilidad de tercerizar funciones en las que otros equipos pueden crear mas valor a menor costo y sobre todo las características del proyecto empresarial con el que cada empresario sueña.